¿Qué es la cadena de frío y por qué es tan importante?
Mantener la cadena de frío es uno de los principales objetivos de quienes se dedican a la logística y transporte de productos alimenticios. Pero, ¿qué es? En este artículo lo explicamos y desgranamos además el porqué de su importancia para la industria, el comercio y la sociedad.
Envoltorio adecuado
La cadena de frío es una cadena de suministro donde la temperatura permanece siempre estable. Es así como se garantiza que el producto llegue al consumidor en estado óptimo. Se habla de cadena porque el proceso de preservación arranca con la producción, continúa durante el almacenamiento y el transporte y culmina en la adquisición por parte del consumidor en comercios y supermercados. Esto requiere una gran coordinación y cuidado por parte de todos los profesionales implicados en el proceso. No sólo se necesita precisión, sino también gran agilidad.
Múltiples sectores
Cuando se habla de cadena de frío se suele pensar en frutas, hortalizas, carnes y pescados, pero su aplicación se extiende a muchos otros sectores como el farmacéutico o incluso tecnológico. Por poner un ejemplo, las vacunas, cuando son transportadas deben conservar su capacidad inmunizante desde que son elaboradas hasta que son administradas a los pacientes.
Efectos del frío en la conservación
Distintas temperaturas tienen distintos efectos en los alimentos: A -7ºC se impide el desarrollo de microorganismos peligrosos para el consumo humano. A -10ºC se imposibilita la aparición de bacterias susceptibles de degradar los alimentos. A -18ºC garantizamos que no se produzca oxidación. Si descendemos a -70ºC el producto se podrá conservar de manera indefinida.
Ventajas de la cadena de frío en logística
El frío es uno de los más antiguos métodos de conservación empleados por los humanos. Las condiciones de vida actuales, sumadas a las largas distancias que a menudo recorren las mercancías lo convierten en absolutamente necesario. Una óptima cadena de frío reduce las mermas en los productos y prolonga su vida útil.
Tecnologías para mantener el frío
Además de camiones frigoríficos y túneles de frío, algunas de las tecnologías que se emplean para garantizar la temperatura de la mercancía son el hielo seco (dióxido de carbono sólido a -80ºC, utilizado por ejemplo en heladerías), los paquetes de gel (muy empleados en sector médico), las placas eutécticas o el nitrógeno líquido. Este último es considerado una sustancia peligrosa y suele utilizarse en el transporte de tejidos biológicos, como órganos donados.
Alta exigencia energética
Por su propia naturaleza y funcionalidad, el mantenimiento de la cadena de frío requiere de tecnología y de un alto consumo energético. Por ello las empresas trabajan continuamente en la obtención de medios más económicos y sostenibles para garantizarla. Tan importante es que hace dos años se instituyó el 26 de junio como Día Mundial de la Climatización.